‘RG3’, expuesto y mal entrenado

RG3_25pEn 2012 fue nombrado Novato Ofensivo del Año. Impuso récord para un quarterback primerizo con rating de 102.4 y ayudó a los Redskins a ganar su primer título de la División Este de la NFC desde 1999, apenas un año después de terminar en el sótano del sector.

Sí, Robert Griffin III llevó esperanza a Washington y le dio a la NFL un quarterback electrizante y carismático. Un Michael Vick de mejor sonrisa y reputación.

De la mano del coach Mike Shanahan y su hijo Kyle (coordinador ofensivo), este producto de Baylor pasó para 3 mil 200 yardas, 20 touchdowns y únicamente cinco intercepciones. La clave fue instalar un sistema “read-option” detrás de la formación “Pistol”, con el fin de aprovechar todas las aptitudes atléticas de “RG3”, quien corrió en 120 ocasiones para 815 yardas (promedio de 6.8 por intento) y 7 touchdowns.

El chico se convirtió en una pesadilla para las defensivas de la NFL. Con la opción de correr y pasar que tenía Griffin III, amén de la sorpresiva campaña del también novato Alfred Morris, la ofensiva de los Redskins era prácticamente indescifrable.

Pero en la Semana 14, al final del partido ante los Ravens, “RG3” corría por la banda izquierda y eludía defensivos… hasta que “cortó” hacia el centro del campo y se topó con Haloti Ngata, quien golpeó la pierna derecha del joven quarterback.

El “efecto de látigo” lesionó un ligamento de la rodilla, pero Griffin III únicamente se perdió el juego de la semana siguiente, en Cleveland, y regresó para los tres últimos compromisos del calendario, que también ganaron los Redskins.

En el primer juego de la postemporada, ante Seattle, “RG3” agravó esa lesión en la rodilla y, para el final del partido, sucedió lo que muchos pronosticaron: al tratar de recuperar un balón, la rodilla de Griffin III se atascó en el lodoso campo del FedEx Field y rompió el ligamento cruzado anterior (LCA), una de las lesiones que pueden significar el principio del fin para un jugador de la NFL.

El prolífico médico James Andrews, quien en 2011 operó a Adrian Peterson de la misma lesión (con impresionante resultados), se encargó de la cirugía y todo el proceso de recuperación del quarterback de los Redskins.

Como medida precautoria, Mike Shanahan decidió que “RG3” no jugaría en la pretemporada, quizá el primero de los pecados que podrían costarle ser despedido al final de la campaña 2013.

Read-option y sin opciones

Para cuando Robert Griffin III regresó al campo, ocho meses después de la reparación del LCA, un par de cosas habían cambiado de manera radical: su confianza no era la misma (normal después de una lesión de ese tipo) y, la más importante, las defensivas de la NFL tuvieron mucho tiempo para estudiar la “read-option” y estaban listas con el antídoto.

Aunque terminó con 329 yardas ante Philadelphia en la Semana 1, “RG3” no era el mismo jugador del año pasado. Su velocidad había disminuido y esa “arma de dos filos” de los Shanahan en 2012 se convirtió en una presa relativamente fácil para las rápidas defensas profesionales.

Hasta la Semana 13, Griffin III ha sido capturado en 33 ocasiones (30 en todo 2012); tiene únicamente 15 pases de touchdown y 11 intercepciones. Su rating es de 83.3 y ha recibido un sinnúmero de golpes, la mayoría evitables.

“Era una locura pensar que Robert Griffin III podría regresar al campo y tener otro año como el que tuvo el año pasado sin una [completa] pretemporada”, dijo Michael Irvin, analista de NFL Network. “Hay un proceso entre temporada y temporada, y todo el mundo pasa por él y lo hacen por una razón. [Sus problemas] nos dicen por qué”.

Los problemas de ‘RG3’ no son sólo de ‘RG3’

Son varias las razones por las cuales Griffin III ha sufrido las de Caín en su segundo año en la NFL:

1) La ofensiva “read-option” tiene pocas variantes y las defensivas de la NFL han encontrado cómo frenarla.

2) La línea ofensiva de los Redskins -particularmente los tackles Trent Williams y Tyler Polombus- ha tenido un pobre desempeño toda la campaña. En muchas de las capturas, “RG3” debe improvisar debido al poco tiempo que tiene detrás de la bolsa de protección.

3) En jugadas rotas, Griffin III no toma buenas decisiones. Obedece más a su instinto y generalmente tratar de correr (exponiéndolo a más golpes en campo abierto).

¿Mal entrenado?

“En este nivel, no entras al campo de football y dominas sin ver el juego una y otra y otra vez”, asegura Irvin. “Es lo que hace Tom Brady, lo que hace Peyton Manning durante la pretemporada; pasan ese tiempo estudiando jugadas y aprendiendo el juego. Tienes que hacer eso. No estoy del todo sorprendido de que [la campaña de Robert Griffin III] haya terminado así. El quarterback debe medir la velocidad de todos en el campo”.

Quizá ese factor ha influido en su bajo desempeño, pero hay ciertos básicos en el campo que “RG3” ha pasado por alto. Por ejemplo, a veces deja pasar mucho tiempo cuando está detrás de la bolsa de protección, particularmente cuando su primera opción (receptor) no está libre; en otras, desespera e inmediatamente se sale de la bolsa y trata de ganar yardas con las piernas.

Es algo que debe aprender con los coaches. Tiene que exponer menos su cuerpo y para ello debe deshacerse del balón. Es preferible un pase corto de dos yardas que una captura; es mejor un pase a las bandas cuando no hay receptor abierto, y siempre será mejor arrojarse al suelo y conceder una captura que una intercepción.

Es lo que hacen los mejores quarterbacks de la NFL, pero esa toma de decisiones se aprende no sólo en el campo sino en las prácticas y hasta en las salas de video, con los coaches.

Indefenso

Si a las penas de Griffin III le agregamos que la defensiva de Washington es una de las peores de la NFL, el problema sólo se agudiza.

En la mayoría de los juegos, “RG3” se ha visto forzado a lanzar más de lo deseado porque los Redskins rápidamente se han ido abajo en el marcador hasta por dos anotaciones.

“Podemos culpar a Robert Griffin III, a la línea ofensiva, el inconsistente juego terrestre, las lesiones… pero la defensiva es atroz”, dijo Deion Sanders. “No puedes ganar con 30 puntos en contra por juego”.

No, no puedes.

Por eso creo que Dan Snyder no puede permitir que los Shanahan sigan exponiendo a Griffin III. Es, sin temor a equivocarme, el quarterback más golpeado de la NFL.

El dueño de los Redskins debe encontrar un nuevo staff de coaches que se preocupe por el físico de “RG3”, que le quiten presión y le ayuden a tomar mejores decisiones en el campo.

Con Shanahan la experiencia y el aprendizaje fueron dolorosos, y pese a contar con uno de los mejores atletas en la posición más importante del juego, el récord de Washington es 3-9 y oficialmente está eliminado de los Playoffs.

La gran incógnita: NFC Este

nfc-eastDALLAS COWBOYS

Altas clave: S Will Allen, LB Justin Durant, DL Anthony Hargrove, TE Dante Rosario, C Travis Frederick (novato) y TE Gavin Escobar (novato).

Bajas clave: LB Victor Butler, DE Kenyon Coleman, LB Dan Connor, CB Mike Jenkins, RB Felix Jones, P Brian Moorman, WR Kevin Ogletree, TE John Phillips, S Gerald Sensabaugh y DE Marcus Spears.

LA GRAN INCÓGNITA: ¿Podrá la dupla Garrett-Romo ganar más de ocho juegos?

…Y entonces, Jerry Jones le dio una extensión de contrato por seis años y 108 millones de dólares a Tony Romo. Luego, el dueño de los Cowboys dijo que quiere que Romo dedique más tiempo al football, “el tiempo que Peyton Manning le dedica al trabajo”.

Definitivamente ese dinero va a motivar a Antonio Ramiro para pasar más tiempo en el trabajo, pero definitivamente ese dinero no lo convierte en Peyton Manning, por más horas que pase en Valley Ranch.

Lo que está claro es que Jones está más que satisfecho con Romo, pero no se puede decir lo mismo del coach Jason Garrett, quien podría acompañar en las bandas a los Cowboys por última vez en 2013 (aunque Jerry insista en que no se está jugando la chamba).

En 2011 y 2012, los dos años completos de Garrett como head coach, Dallas ha terminado con marca de 8-8, y en ambas temporadas los Cowboys perdieron el boleto a los Playoffs en el último juego del calendario regular ante un rival divisional.

La campaña pasada, aunque terminaron con la ofensiva total 6, el ataque terrestre de los Cowboys fue el 31 de la NFL (promedio de 79.1 yardas por juego). Sólo el de Arizona fue peor.

En 2013, Garrett debe encontrar la manera de balancear la ofensiva de Dallas y no dejarle tanta responsabilidad a Romo, quien la temporada pasada tuvo dos juegos en los que lanzó 62 pases (ambos los perdió) y otro seis en los que intentó 40 o más.

Ahora será el coordinador ofensivo, Bill Callahan, el encargado de llamar las jugadas. En su época con los Raiders, Callahan ponderaba el ataque terrestre y se espera que haga lo mismo en Dallas.

Hay quien piensa que ese fue el primer paso en el adiós de Garrett y que Callahan es el candidato natural para quedarse como coach de los Cowboys a partir de 2014, en caso de un nuevo fracaso.

Nada de eso sucederá si Garrett, Romo y los Cowboys son capaces no sólo de ganar más de ocho juegos en 2013, sino de darle a Dallas un boleto de regreso a los Playoffs.

NEW YORK GIANTS

Altas clave: K Josh Brown, K David Buehler, LB Dan Connor, LB Aaron Curry, LB Kyle Bosworth, DT Cullen Jenkins, CB Trumaine McBride, S Ryan Mundy, WR Louis Murphy, TE Brandon Myers, QB Curtis Painter, DT Mike Patterson, CB Aaron Ross y OT Justin Pugh (novato).

Bajas clave: TE Martellus Bennett, LB Chase Blackburn, LB Michael Boley, RB Ahmad Bradshaw, DT Chris Canty, WR Domenik Hixon, S Kenny Phillips y DE Osi Umenyiora.

LA GRAN INCÓGNITA: ¿Cómo queda la defensiva después de tantas bajas?

Una cirugía en la espalda ha causado la baja momentánea del ala defensiva Jason Pierre-Paul, cuyo periodo de recuperación es, mínimo, de 12 semanas. Se estima que esté listo para el inicio de la campaña regular, pero el coach Tom Coughlin prefiere no ser tan optimista.

Otro doloroso golpe a la defensiva de los Giants, que en la agencia libre perdió a los linebackers Chase Blackburn y Michael Boley, al tackle Chris Canty, al safety Kenny Phillips y al ala Osi Umenyiora.

Mathias Kiwanuka es el indicado para suplir a Pierre-Paul y hacer mancuerna con Justin Tuck en los extremos de la frontal.

La pérdida de Umenyiora se magnifica, pues Pierre-Paul fue el líder en capturas de quarterback la temporada pasada, con 6.5. Umenyiora fue segundo en el equipo con 6; Tuck tuvo cuatro; Blackburn tres, y Canty otras tres.

Kiwanuka también sumó tres capturas.

La defensiva de los Giants fue una de las peores (31) de la NFL en 2012 al aceptar 383.4 yardas por juego; 129.1 por tierra y 254.3 por la vía aérea.

Coughlin confía en el coordinador defensivo Perry Fewell, con quien trabajó cinco campañas en Jacksonville, pero no aceptará que su defensa nuevamente sea una de las peores de la Liga.

Presionar al quarterback debe ser una prioridad, pero los Giants no firmaron a nadie en la agencia libre con esa habilidad y la lesión de Pierre-Paul sólo añade incertidumbre.

PHILADELPHIA EAGLES

Altas clave: LB Emmanuel Acho, LB Connor Barwin, TE James Casey, S Patrick Chung, CB Bradley Fletcher, P Donnie Jones, RB Felix Jones, S Kenny Phillips, LB Jason Phillips, NT Isaac Sopoaga, CB Cary Williams, OT Lane Johnson (novato) y QB Matt Barkley (novato).

Bajas clave: CB Nnamdi Asomugah, T King Dunlap, QB Trent Edwards, DT Cullen Jenkins, LB Akeem Jordan, DT Derek Landri, P Mat McBriar, TE Evan Moore, DT Mike Patterson, CB Dominique Rodgers-Cromartie y DE Darryl Tapp.

LA GRAN INCÓGNITA: ¿Funcionará la ofensiva de Chip Kelly en la NFL?

La “spread-offense” que tanto éxito le significó a Chip Kelly con los Ducks en Oregon, ha llegado a la NFL.

Read-option, pases cortos, pantallas con los receptores y no-huddle, son sólo algunos de los elementos de una ofensiva que causó centenares de dolores de cabeza en el football de la NCAA. La clave está en la velocidad.

En Oregon, Kelly tenía un equipo bajo de estatura, pero rapidísimo. Desde el quarterback, hasta la línea ofensiva, los corredores y, por supuesto, los receptores, todos eran jugadores veloces que representaban ventajas en los duelos uno a uno con los defensivos.

La idea no suena mal, pero hay quien duda que Kelly sea capaz de trasladar exitosamente su “spread-offense” a la NFL.

“Es fácil decir, ‘sí, funcionó en el colegial’”, dijo Ron Jaworski, ex quarterback de Eagles y analista de ESPN. “Pero la NFL es una liga diferente, con jugadores muy rápidos que tienen toda la semana para prepararse. A nivel colegial, tienes 20 horas para prepararte para esa ofensiva de Oregon. Y si quitas las tres horas del partido, te quedan 17 horas en una semana para practicar y prepararte para ese estilo de ofensiva. En la NFL estos tipos trabajan 17 horas al día. Al día, no a la semana, para prepararse, así que no hay secretos”.

Jaworski duda que únicamente con pases cortos los Eagles sean capaces de ganar partidos en la NFL.

Cierto. Al menos con los Ducks, el ataque de Kelly no incluía muchos pases de 25 yardas o más. Eso no quiere decir que no los incorporará en Philadelphia.

Lo único que sabemos es que no sabemos cómo será la ofensiva de Eagles con Kelly al mando. Sabemos que será agresiva y que, por supuesto, tendrá rasgos y conceptos de la que usó en Oregon.

Michael Vick será el quarterback titular y el receptor DeSean Jackson podría ser uno de los elementos que más luzcan en el ataque de Kelly.

Ya falta poco para conocerla.

WASHINGTON REDSKINS

Altas clave: CB E.J. Biggers, NT Ron Brace, C/G Kevin Matthews, DE Phillip Merling, LB Darryl Tapp, T Jeremy Trueblood, QB Pat White,  CB David Amerson (novato) y S Bacarri Rambo (novato).

Bajas clave: LB Lorenzo Alexander y CB D.J. Johnson.

LA GRAN INCÓGNITA: ¿Protegerá Shanahan a RG3 con una ofensiva convencional?

Todavía no se borra de la memoria aquella jugada en la que Robert Griffin III terminó de lesionarse los ligamentos de la rodilla, en Playoffs ante los Seahawks.

Es hora en la que muchos siguen cuestionando a Mike Shanahan, coach de los Redskins, por haber permitido jugar al entonces quarterback novato, arriesgándolo a una lesión que pudo poner en peligro su carrera como profesional.

Desde entonces, RG3 fue operado exitosamente y ya entrena con el resto de sus compañeros, aunque no al 100%. Aún usa una aparatosa y moderna rodillera mecánica, pero puede “plantarse” y lanzar el balón.

Shanahan no ha confirmado ni negado si va a seguir usando la ofensiva “read-option”, en la que RG3 es prácticamente un corredor más (120 intentos, 815 yardas, promedio de 6.8 y 7 touchdowns). Eso, por supuesto, significarían más golpes en campo abierto para Griffin III. Los golpes más fuertes.

Por momentos en la campaña 2012 Shanahan recurrió a una ofensiva más convencional, con elementos de la West Coast, pero que él bautizó como la “East Coast”. Ello le ahorraría muchos golpes a RG3 quien, dicho sea de paso, debe aprender a deslizarse y evitar contacto innecesario, particularmente cuando “rompe” la línea de scrimmage.

Hay que recordar que los Redskins cuentan en el backfield con Alfred Morris, quien corrió para 1,613 yardas en 2012, con promedio de 4.8 y 13 touchdowns. Morris se adaptó inmediatamente al bloqueo de zona que tanto le gusta a Shanahan y se convirtió en el robo del Draft.

Es probable que RG3 no juegue en la pretemporada y que Shananan no devele sus planes hasta el inicio de la campaña regular, pero algo debe hacer para proteger a la nueva cara de la franquicia.

No es un secreto que los Redskins irán tan lejos como los lleve Robert Griffin III, y sería lamentable que se lesionara nuevamente por la necedad de hacerlo correr en una ofensiva read-option que, además, estará más que estudiada por las defensivas.

Shanahan tiene la palabra.